Un día de frío se me ocurrió hacer picarones (vegan of course). Invité a una amiga y junto con mi hermana nos pusimos a cocinar, entre conversa y conversa soñando como arreglar el mundo, olvidándonos de lo malo, riendo y pasándolo bien se me ocurrió escribir al respecto.
La comida es una excelente forma de relacionarnos con el resto, mas allá de un carrete o algo impersonal. Hacer algo con nuestras propias manos en vez de comprar todo listo para servir le da un gusto más rico a las comidas, sobretodo cuando estas comidas están excentas de explotación animal.
Este sistema nos acostumbra a consumir de forma rápida, llegar y llevar, el veganismo me ha acercado a valorar el tiempo y dedicarlo con paciencia a aprender cosas nuevas, cocinar cosas veganas con amigos además de ser entretenido, acerca a las personas y es un panorama delicioso para fines de semana helados…
Hay comidas que no me resultaron la primera vez, pero la práctica hace al maestro, ¡¡NO SE DESANIMEN!!
Ya saben, si algún amig@ les pregunta:
¿¿¿¿¿Y qué comen si no comen carne, leche ni huevos?????
¡Invítenlos a cocinar!
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